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8 de julio de 2010

En el Día Internacional del Árbol, homenaje al Drago de Icod de los Vinos, en Tenerife

8 DE JULIO-DÍA INTERNACIONAL DEL ÁRBOL
"Somos seres, con venas, ramas, hojas, nos nutren el aire y el agua, somos árboles, al igual que los verdes, algunos altos otros bajitos, los hay raros, espinados, caídos, gordos y esbeltos, somos árboles, al final somos tierra, hay nidos felices de ideas viviendo en nuestra cabeza, siempre estamos mirando al cielo con los brazos abiertos, nos renovamos, nos secamos, a veces estamos tristes y se nos caen las hojas, otras enojados y nos llenamos de plagas, somos árboles, también seamos humanos, con el alma hecha raíz, respetando a nuestros hermanos, los árboles del planeta"

El grabado fue publicado en un libro del propio Friedrich Heinrich Alexander von Humboldt en el año 1852. Humboldt visitó Tenerife en el año 1799 y a través de este dibujo recogió el estado en el que quedó el Drago de La Orotava tras un temporal anterior al que terminó por tumbarlo para siempre.

El tristemente desaparecido ejemplar de La Orotava, en Tenerife. El mismísimo explorador y naturalista Alexander von Humboldt se interesó a finales del siglo XVIII por este drago que se erigía en los jardines de Franchy. Aseguran que se trataba de un "gigante" de 25 metros de altura y 23 metros de perímetro pero hay dudas de que esto fuera así. De serlo, habría sido el ejemplar de drago más grande jamás conocido ya que el más viejo que se conserva actualmente en Icod de los Vinos, también en Tenerife, mide "sólo" 17 metros de altura, tiene 20 metros de perímetro y pesa 150 toneladas sin contar las raíces desgraciadamente nunca se sabrá a ciencia cierta cuan grande era el Drago de La Orotava porque un vendaval lo derribó en el año 1867.
Junto con el grabado, Humboldt comenta:
"Esta "Dracanea draco" fue objeto de veneración por parte de los guanches, como lo han sido otros árboles como el olivo de Atenas o el plátano de Lidia. El perímetro de este ejemplar medido a unos pies por encima de la raíz es de 45 pies. Distintas variedades del mismo género se encuentran en el Cabo de Buena Esperanza, China y Nueva Zelanda. Se compara el drago con otros árboles que alcanzan edades muy avanzadas como el Baobab o distintas especies de eucaliptos. Este tipo de árboles, que pertenecen a grupos diferentes, adquieren diámetros de 20 pies".

Todos los dragos están sentenciados a muerte. Su copa alcanza tales dimensiones que el tronco no puede aguantar tanto peso. Por eso, es habitual que tras varios cientos de años caigan por su propio peso o por la fuerza del viento o de algún temporal. Se dice que los árboles siempre mueren de pie, pero incluso en esto el drago es excepcional y único.

*En Grecia y, posteriormente, en el imperio Romano, al Drago se le consideraba un árbol sagrado e intocable, dado que su "sangre roja" o savia posee grandes poderes medicinales, y era utilizada para un gran número de sanamientos.

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